Mantenimiento proactivo. La mejor forma de mejorar la calidad de la actividad industrial y de su personal humano.

El mantenimiento proactivo es el siguiente paso de la transformación industrial para conseguir minimizar los costes, pérdidas de producción y otros problemas que se detectan a tiempo gracias a este tipo de servicios.

Hoy día, la industria está viviendo una gran transformación digital. Transformación que se ha convertido en una necesidad para hacer de cualquier industria, una industria automatizada, conectada, inteligente y sostenible, lo que se traduce en una industria más competitiva y rentable.

El área de mantenimiento industrial ha evolucionado también en los últimos años, viéndose actualmente como un beneficio y valor añadido para la mejora una fábrica, y no como ocurría hace años, donde sólo se veía como un coste adicional.

A continuación explicamos los puntos clave de este tipo de servicios, sus beneficios y consecuencias de quienes ya lo utilizan en sus centros de producción.

Empecemos por el principio, ¿Qué es esto del mantenimiento proactivo?

El mantenimiento proactivo tiene como objetivo principal detectar la causa raíz de los posibles fallos que puedan tener los equipos para corregirlos antes de que provoquen una avería irreparable, evitando así el colapso en la producción. 

Dentro del mantenimiento, existen diferentes formas de llevarlo a cabo. Las más comunes son: Mantenimiento correctivo para reparar las posibles incidencias aparecidas, mantenimiento preventivo con comprobaciones programadas en intervalos regulares, Mantenimiento basado en condiciones, esto es, llevar a cabo una supervisión en tiempo real de ciertos parámetros para comprobar que el equipo esté trabajando en su régimen óptimo. Por último, el mantenimiento predictivo, donde con un modelo matemático del equipo seremos capaces de predecir posibles incidencias y anticiparnos a ellas

Pero ¿por qué se hace imprescindible tener un servicio de mantenimiento en la industria?

Partiendo del concepto de que el mantenimiento industrial sirve para alargar la vida útil y mejorar el rendimiento de toda la maquinaria que entra en el proceso de fabricación, ya sólo con esto, estamos minimizando posibles costes futuros. Si, además, hablamos de industrias 4.0, donde cada vez encontramos maquinaria más avanzada y compleja, se hace necesario este servicio.

Y los principales motivos por los que se hace imprescindible son los diferentes beneficios que obtendremos que se apreciarán desde el primer momento. Destacando los siguientes:

• Previene y evita accidentes laborales, dado que confirmaremos que la maquinaria funciona correctamente.
• Disminuye pérdidas por posibles paradas de producción.
• Impide que nos encontremos con daños en alguna maquinaria que sean irreparables, dado que los vamos a detectar antes de que ocurra.
• Reduce costes.
• Aumenta la vida útil de la maquinaria y, por ende, de la fábrica en sí.

En definitiva, conseguiremos mejorar la calidad tanto de la actividad industrial como de las personas que trabajan en ella